jueves, 2 de enero de 2014

De Granada a Ibi: el escultor Aurelio López Azaustre

Mi artículo frustrado sobre el tío Aurelio

Como ya indiqué en la anterior entrada del blog, debido al homenaje que le tributamos al tío Aurelio a finales del año pasado, realicé tres artículos que versaban sobre su vida y obra. El tercero lo escribí para mandarlo a la revista Enfarina't, una revista anual de las Fiestas de Invierno del pueblo de Ibi (Alicante). Me enteré de su existencia tarde, por lo que cuando mandé el artículo, la revista ya se estaba maquetando y finalmente no pudo ser publicado. Ahora el artículo está desactualizado, pues la escultura de Aurelio de los Reyes Magos en esa localidad ha vuelto a su lugar en la plaza del mismo nombre, tras el proceso de restauración al que se le sometió tras los desperfectos que sufrió en el verano de 2012. Como no me gustaría que el artículo permaneciera oculto en las entrañas de mi disco duro, lo cuelgo en mi blog para todos aquellos que les pueda interesar, y en fechas tan señaladas, a pocos días de la Epifanía, donde los Reyes Magos resultan ser unos personajes importantes. Igualmente cuelgo en el blog las fotos que mandé a la revista para que ilustraran el mencionado artículo (cambiando una de ellas por una de mejor calidad).


De Granada a Ibi: el escultor Aurelio López Azaustre

Por Francisco José Canales-''Azaustre'' López

A través de estas páginas quiero rememorar y homenajear la vida y obra de un afamado escultor granadino que dejó un ‘gran hijo’ en tierra ibense hace ya largos años; hijo modelado por sus ágiles manos y que potenció más si cabe y llevó el nombre de Ibi allende las montañas.

Me refiero al escultor Aurelio López Azaustre y evidentemente ese ‘gran hijo’ es el Monumento a los Reyes Magos [1974] que hasta hace unos meses estaba situado en la plaza del mismo nombre. Lamentablemente el paso del tiempo con sus inclemencias, las características físicas de la obra y la mala fortuna hicieron que el monumento que era cara visible como mascarón de proa de la localidad sufriera serios desperfectos en un triste accidente que costó además que un operario municipal resultara herido de gravedad. Hoy, el Monumento tras su proceso de restauración busca acomodo en un nuevo emplazamiento (cubierto y protegido) que le permita ser de nuevo motivo de orgullo de la localidad de Ibi.

Aurelio López Azaustre junto a su obra 'Ángel Custodio' [1971]. Foto: propiedad Concepción Muñoz Torres.

Lejanos parecen ya los días en que se realizó la obra y ésta se inaugurara. Siguiendo los datos que nos ofrecen el Doctor en Bellas Artes Gonzalo Cano en su Tesis Doctoral sobre Aurelio López [2003] y el historiador, articulista y sobrino del propio Aurelio, José Luis Delgado, recordamos que la obra era realmente majestuosa, una de las obras más y mejor recordadas del escultor granadino, tanto es así que el mismo Aurelio declaró en la prensa en 1976 que el Monumento a los Reyes Magos lo consideraba como su obra más importante.


El Monumento a los Reyes Magos en el taller de Granada. Foto: propiedad Concepción Muñoz Torres


Es en esos primeros años 70 del siglo XX cuando en Ibi, localidad señera en la industria del juguete, se busca la realización de un monumento escultórico que rinda homenaje al mundo de la infancia y la ilusión personificado en estos tres Magos de Oriente. La Comisión de los Reyes Magos de Ibi, presidida por Eduardo Raya, encargó una serie de proyectos, y es el de Aurelio López Azaustre el que resulta ganador, por lo que se formaliza el contrato en febrero de 1974.

El conjunto, grandioso a la vez que sencillo y lejos de artificios artísticos, buscaba acercarse a los niños, a quienes iba dirigida la obra, por lo que el autor procuró que la misma fuese ‘simple y asequible a todas las mentalidades’. El monumento, ciertamente grande, en su punto más alto (la cúspide de la estrella de Belén) llegaba a medir 5 metros de altura y estaba realizado mediante piedra artificial. La escultura fue realizada en un taller que Aurelio alquiló en Granada ex profeso para obras de gran tamaño y que era propiedad de la familia de su esposa, y contó con la ayuda de su amigo Manuel Sierra en los trabajos de vaciado de la escultura. Como leemos en los artículos de José Luis Delgado y sabemos por la viuda de Aurelio, para realizar al rey Baltasar, el artista se fijó como modelo en el estudiante guineano Fortunato Okembe, y para la niña del centro del monumento el escultor tomó como modelo a Sonia Toro, vecina suya e hija de una amiga de su esposa.


Aurelio López Azaustre en su taller de Granada realizando la maqueta para el Monumento a los Reyes Magos. Foto: propiedad Concepción Muñoz Torres.

Tanto Aurelio como su colaborador Manuel Sierra asistieron el 5 de enero de 1975 a la inauguración oficial del monumento, en un acto lúdico que contó con la asistencia de la población local y de las autoridades de la época, entre ellos el alcalde Ángel Brotóns, el alcalde de Alicante Francisco García, el Gobernador Civil Benito Sáez o el presidente de la Diputación provincial Manuel Monzón.

El Monumento a los Reyes Magos ya colocado en Ibi en el proceso de realización de la plaza. En la foto aparece el escultor de la obra, Aurelio López Azaustre (fila de arriba, 4º por la izda. mirando para abajo). Foto: propiedad Juan Bernabeu Martínez.

Mismo momento que foto anterior. El autor de la obra (6º por la izda.) observando junto a otras personas las obras en la plaza, ya instalado el Monumento a los Reyes Magos. Foto: propiedad Concepción Muñoz Torres.


Como digo, fue una de las obras más importantes de Aurelio López. Pero previamente, desde sus inicios en el mundo del arte con temprana edad ya había realizado un sinfín de tallas, que hoy dispersas por toda la geografía española dan testimonio del arte que creaba con entera dedicación y minuciosa creatividad. Recuerdo un testimonio que me contó su viuda, la tía Conchita. Era tal la capacidad artística del autor y su fijación a todas horas en la creatividad y plasmación de ideas, que solía llevar bolas de billar de las antiguas, las de marfil, y que con una gubia se ensimismaba en el objeto y de él sacaba unas preciosas manos que muy probablemente luego emplearía en figuras de santos o Vírgenes. A su increíble talento natural para el arte sumaba una personalidad humilde, que daba como resultado una gran persona, un gran artista.


Momento de la inauguración del Monumento a los Reyes Magos (5-Enero-1975). Foto: propiedad Asociación Reyes Magos de Ibi.


Aurelio, nacido en Granada en 1925, contó entre sus maestros a escultores e imagineros de renombre, tales como José Navas Parejo, Eduardo Espinosa Cuadros, Domingo Sánchez Mesa en un primer momento y más tarde José Planes. Su figura, además de a la creación de obras de arte, estuvo vinculada al mundo de la docencia, durante un breve período de tiempo en la Escuela de Artes y Oficios de Valencia y poco después a la Escuela de Artes y Oficios de Granada, donde estuvo trabajando hasta poco antes de fallecer. En 1967 obtiene el título de Maestro Imaginero en la Escuela Superior de Bellas Artes de Sevilla ‘Santa Isabel de Hungría’, con la elaboración de una obra en terracota policromada, el ‘Ecce Homo’ que representa a Cristo sufriente con la corona de espinas. Como refiere el Doctor en Bellas Artes Gonzalo Cano, ya antes de conseguir dicho título, Aurelio efectuó con maestría el tema de la talla religiosa, y después de esa fecha lo seguirá cultivando con soltura. De hecho abundarán la sucesión de figuras de santos como San Juan de Dios, San Francisco de Asís, San Bruno, etc; multitud de Crucificados, Vírgenes con Niño, monjes y frailes como Fray Leopoldo, sólo por poner unos ejemplos. Dentro de este grupo de imaginería religiosa, hay que resaltar la creación de tallas procesionales como el Santísimo Cristo de la Humildad en su Flagelación de Sanlúcar la Mayor (Sevilla) [1965], María Santísima de los Dolores de Nerja (Málaga) [1948], o en la propia Granada, donde actualmente procesionan dos tallas de las cuatro que lo hicieron: Nuestra Señora de los Dolores [1961] y María Santísima de la Concepción [1978]. De ésta última, ‘la Concha’, se hace hincapié en el emocionante realismo de la Dolorosa que la convierte en una de las imágenes más queridas y celebradas de la Semana Santa granadina. Es digno de mención detallar la minuciosidad con que sus obras religiosas fueron elaboradas, hasta el mínimo detalle de expresividad que transmiten personalidad y sentimiento.


Monumento a los Reyes Magos de Ibi. Vista lateral. Foto: propiedad Concepción Muñoz Torres.

Monumento a los Reyes Magos de Ibi. Vista trasera. Foto: propiedad Concepción Muñoz Torres.


Además de ser experto en imaginería, entró de lleno en la estatuaria de carácter profano. Un grupo dentro de ella es la escultura moderna, el juego de los materiales y los volúmenes creando formas diversas, como pueden ser la realización de varios ‘Desnudos’ o el Conjunto Monumental de la Fuente de Colinas Bermejas en Monachil (Granada) [1973]. Y por último hay que citar los numerosos retratos que realizó a lo largo de su trayectoria profesional, ya sea de personajes conocidos como poetas o pintores amigos suyos o de personajes desconocidos, como Oración [1954], Retrato de Valenciano [1958-62] o Cabeza de Gitano [1972].


Santo Cristo de la Liberación. Granada. Obra de Aurelio López Azaustre [1963]. Foto: propiedad Concepción Muñoz Torres.

Aurelio falleció en 1988 víctima de un cáncer de pulmón a la edad de 62 años, dejando en su taller obras sin acabar, y seguramente con su mente se fueron infinidad de ideas que no pudieron materializarse en esculturas porque la muerte se lo llevó demasiado pronto. A pesar de ello, nos queda su legado artístico, por eso yo invito al pueblo de Ibi que con orgullo mantenga (en el lugar donde esté mejor acondicionado y protegido) el Monumento a los Reyes Magos como una de las obras cumbre de Aurelio López Azaustre, y que símbolo por antonomasia del pueblo, sea herencia viva para las generaciones futuras, es decir, para los ilusionados niños que llenarán de alegría nuestras calles.

Como ya escribí para un artículo en prensa, el pasado mes de octubre a Aurelio se le rindió un homenaje institucional en el Ayuntamiento de Granada, al cumplirse en mayo el XXV aniversario de su fallecimiento. El homenaje era conjunto a otro artista granadino, el escritor de temas infantiles José María Garrido Lopera, que a la sazón era amigo y concuñado de Aurelio López, además de uno de sus modelos, ya que el escultor realizó un busto de terracota de Garrido Lopera [1955]. Inmediatamente después se inauguró una Exposición de ambos, ‘Dos granadinos ilustres’, con fotografías y algunas de sus obras. En ella, tanto el Monumento a los Reyes Magos como el pueblo de Ibi estuvieron presentes.


Busto del escritor José María Garrido Lopera, obra de Aurelio López Azaustre [1955]. Foto: propiedad Concepción Muñoz Torres.


Concluyo estas líneas dando franca gratitud al pueblo de Ibi, que durante tantos años ha tomado como parte importante de sí mismo el Monumento a los Reyes Magos; así como a los ibenses que tienen en estima a mi tío-abuelo Aurelio López Azaustre, entre ellos cito a la archivera María José Martínez Tribaldos, por la ilusión e interés cultural que ha puesto en el reconocimiento público del tío Aurelio. Mi más sincero abrazo desde Granada.

Llavero conmemorativo de la inauguración del Monumento a los Reyes Magos de Ibi en 1975. Foto y llavero de mi propiedad.

No hay comentarios:

Publicar un comentario